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En horas de la mañana de este miércoles, la Policía de Investigaciones (PDI) entrevistó a dos mujeres religiosas en relación a la investigación del hallazgo de un cuerpo "esqueletizado" en plena vía pública de la comuna de Ñuñoa.
Según las investigaciones, se sospecha que las monjas podrían estar vinculadas al caso, tras haber sido observada en imágenes de cámaras de seguridad transportando los restos humanos en un carro de feria y posteriormente abandonándolos en la calle Las Talaveras.
Las pericias realizadas previamente confirmaron que la víctima sería una mujer de 60 años, cuya data de muerte se estima en aproximadamente seis meses, evidenciada por el estado "esqueletizado" del cuerpo.
A pesar de las múltiples hipótesis que han surgido en torno a este suceso, durante la noche del martes la PDI procedió a allanar un centro de donaciones supuestamente vinculado a un convento religioso, en busca de más pistas que esclarezcan el caso.
Por otro lado, la policía descartó la participación de un hombre que conducía un triciclo azul, quien habría encontrado los restos humanos mientras recolectaba especies, al no encontrarse indicios que lo vinculen con el crimen.
El subprefecto Juan Luis Fonseca, jefe de la Brigada de Homicidios Metropolitana, ha confirmado que la víctima es una mujer de 60 años de edad. Además, las pericias realizadas hasta el momento indican que el cuerpo no presenta evidencia de alteración traumática atribuible a terceros, aunque la investigación continúa en curso para esclarecer completamente los detalles del hecho.
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