Según el comunicado, la acusación se relaciona con hechos supuestamente ocurridos hace más de una década, específicamente entre julio de 2013 y julio de 2014, cuando, según Valenzuela, Boric habría sido víctima de acoso sistemático por parte de la denunciante.
El abogado explicó que, durante el período mencionado, el actual Mandatario recibió 25 correos electrónicos enviados desde diversas direcciones, todos vinculados a la misma persona.
Diez años después, el 6 de septiembre de 2024, la denunciante presentó una acción legal en la Fiscalía Regional de Magallanes, acusando la difusión de registros de imágenes privadas y un supuesto acoso sexual en virtud del artículo 494 del Código Penal.
Valenzuela aseguró que estos hechos nunca ocurrieron y aclaró que no existe comunicación alguna entre el Presidente y la denunciante desde julio de 2014. "Mi representado jamás tuvo relación afectiva ni de amistad con ella", subrayó el abogado.
En el comunicado, el abogado señaló que el Presidente Boric dio instrucciones claras para colaborar con el esclarecimiento de los hechos desde el inicio de la investigación.
El 22 de octubre de 2024, Valenzuela entregó al fiscal Cristián Crisosto Rifo toda la correspondencia electrónica enviada por la denunciante, argumentando que estas pruebas "buscan demostrar la falsedad de los hechos denunciados y dar cuenta del acoso sufrido por mi representado".
Tras la publicación del comunicado, la Fiscalía Regional de Magallanes confirmó que existe una causa penal en carácter de desformalizada. Según el fiscal Crisosto, el caso sigue bajo investigación con carácter reservado y cuenta con un equipo especializado trabajando en las diligencias pendientes.
En tanto, el abogado Jonatan Valenzuela enfatizó que el Presidente Boric está comprometido con la transparencia en este caso.
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