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El Centro de Responsabilidad Salud Mental del Complejo Asistencial "Dr. Víctor Ríos Ruiz" atiende actualmente a 540 usuarios en la provincia de Biobío, a través de sus distintos dispositivos: Área Ambulatoria, Programa Asertivo Comunitario, Hospital de Día, y Atención Cerrada, con apoyo de un equipo multidisciplinario compuesto por psicólogos, terapeutas ocupacionales, psicopedagogo, trabajadores sociales, técnicos en enfermería, técnicos sociales, y administrativos.
Dicho CR cuenta con el Centro de Costo Infanto Juvenil, unidad especializada que atiende a usuarios y usuarias desde los cinco a los 17 años de edad, que presenten cuadros agudos, como: Depresión grave con ideación e intentos suicidas, trastornos de conducta alimentaria, trastornos del desarrollo de la personalidad, trastornos de conducta, déficit atencional, cuadros psicóticos y/o cuadros bipolares, entre otros.
En ese contexto, la psiquiatra infantil Gloria Reyes, jefa subrogante del Centro de Costo Infanto Juvenil sostuvo que la adolescencia es un periodo crítico del desarrollo, "donde vemos cómo la influencia social de los pares tiene una gran importancia en cómo se van desarrollando estas personalidades, y nos damos cuenta de la importancia que tiene la supervisión, la familia, que hoy día hay un impacto mucho mayor, por ejemplo, de las redes sociales, de las amistades, y por ello se debe supervisar, independientemente de las edades y de los procesos de autonomía de los jóvenes".
La profesional advirtió que lo anterior es transversal al entorno social, escolar y familiar de las personas, ya que todos estamos propensos a sufrir una patología de salud mental, y enfatizó que, si bien no hay recetas mágicas, la idea es buscar el equilibrio a través de "una comunicación fluida con los niños y niñas, saber con quiénes se relacionan, qué juegos en línea utilizan, de qué forma se comunican, porque ahí se abre una ventana gigante donde hay acceso a muchas situaciones de riego. Los hijos deben tener normas y límites, independiente si tienen cuatro años o 15, los padres tienen que estar supervisando, y llegar más al diálogo, al consenso, hablar con argumentos, para entenderse y comprender la etapa evolutiva de sus hijos".
Por su parte Silvia de Bonis, trabajadora social, supervisora (s) del Centro de Costo Infanto Juvenil del Complejo Asistencial, detalló que los pacientes llegan al establecimiento asistencial mediante hospitalización, derivación de atención primaria o por ingreso de Urgencias, y si bien el médico da el punto de partida al abordaje del caso, posteriormente es un equipo multidisciplinario el que se hace cargo de este.
"Nosotros como profesionales somos co-garantes de derechos, y nos tenemos que hacer cargo si hay dificultades o vulneración de nuestros chicos, por lo tanto, desde ahí, siempre buscamos su protección, y le damos a entender a la familia, al contexto social o escolar, que se busca mejorar la situación, y no llegar a una afectación mental del menor", añadió.
De Bonis y Reyes, llamaron a los padres, red de apoyo y profesionales de la educación a estar en constante actualización de las herramientas de las cuales se dispone para apoyar el desarrollo de los menores, y enfatizaron que existen múltiples vías a través de las cuales se puede obtener asesoría en pro de una crianza respetuosa y responsable.
A su vez, ambas profesionales coincidieron en que, durante la niñez y adolescencia, se deben propiciar una serie de factores protectores, que se deben considerar ya sea en aula como en el contexto familiar.
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