Salud

Preocupación por brote de bacteria en insumos médicos que lleva más de dos años sin control

Desde la Sociedad Chilena de Infectología se hizo un llamado a las autoridades, en relación a "la carencia de información oficial respecto a la evolución y magnitud del brote que ya lleva más de dos años de evolución".

Contexto, Freepik
Contexto / FUENTE: Freepik

La Sociedad Chilena de Infectología ha manifestado su profunda preocupación por el brote de infecciones por Burkholderia cepacia complex al interior del territorio nacional. Una situación que se ha extendido por más de dos años y que ha tenido una serie de consecuencias las cuales van desde la suspensión de cirugías a nivel país, hasta la muerte de pacientes.

Para entender el panorama que ha enfrentado el país y su sistema de salud es necesario remontarse hasta octubre de 2021, mes en que el Instituto de Salud Pública (ISP) comenzó a recibir las primeras denuncias de productos farmacéuticos posiblemente contaminados. Lo que, en consecuencia, decantó en la respectiva investigación y análisis de los artículos bajo sospecha.

De esta forma, el viernes 28 de enero de 2022 el Ministerio de Salud de Chile (Minsal) emitió la Circular C37 N°1 alertando de un presunto brote por complejo Burkholderia cepacia. Dentro de la misiva la autoridad sanitaria hizo hincapié en la aparición de casos de infecciones por un mismo agente, en distintos establecimientos, lo que sería sugerente de Ia presencia de un brote de infecciones multicéntrico de fuente común secundaria a Ia contaminación de un fármaco u otro producto utilizado en los pacientes.

Durante los meses siguientes la situación, fuera de controlarse, se agudizó. Es así como entre 2022 y 2023 se generan tres nuevas alertas relacionadas al complejo Burkholderia cepacia. Cada una de ellas con instrucciones para continuar con la investigación por parte de los establecimientos con casos sospechosos. En consecuencia, a través de la circular C37 nº11, el Minsal dio cuenta que al 24 de julio de 2023 "se han logrado confirmar y caracterizar cinco brotes/conglomerados multicéntricos, de los cuales tres se mantienen activos, identificándose reservorios en dos de ellos".

PREOCUPACIÓN DE LOS EXPERTOS

Ante este panorama la Sociedad Chilena de Infectología (SOCHINF) se manifestó señalando: "Ha comenzado un nuevo año y lamentablemente el brote de infecciones por Burkholderia cepacia complex continua activo. Desconocemos la magnitud actual del brote, pues el último informe oficial emitido por Minsal se remonta al 31 de julio del año 2023, pero por la información recibida tanto a través de nuestros socios cómo también de miembros del Directorio de SOCHINF, sabemos que el brote sigue activo adicionando, además, infección concomitante por Ralstonia pickettii".

A lo anterior, desde la entidad sumaron su preocupación por la falta de información respecto del brote que, según la Agencia Nacional de Medicamentos (Aname) del Instituto de Salud Pública (ISP), a octubre de 2023 contabilizaba 45 personas fallecidas.

"Nos preocupa de sobremanera, por una parte, la carencia de información oficial respecto a la evolución y magnitud del brote que ya lleva más de dos años de evolución y, por otra, los consecuentes problemas de abastecimiento de determinados insumos de gran relevancia para la atención de los pacientes, tanto por retiros del mercado indicados por el ISP cómo por suspensión de la producción de otros", plantearon.

"Es por esto por lo que, cómo sociedad científica, solicitamos a las autoridades ministeriales actualizar la información epidemiológica, los avances en el estudio de la fuente común y las medidas planificadas para lograr definitivamente el control de este brote de gran magnitud que ha afectado a pacientes a lo largo de todo el país, así como también gestionar los mecanismos para reemplazar aquellos productos que hoy se encuentran en falencia y pudieran generar un riesgo adicional al implementar medidas locales inseguras para nuestros pacientes", complementaron.

IMPACTO EN LOS INSUMOS

Desde la SOCHINF recalcaron que el 10 de enero de 2024 se emitió el Ordinario 21 Nº 60, que en el marco de la "Investigación de brote multicéntrico de infecciones por complejo Burkholderia cepacia", solicitando a las instituciones de salud identificar todos los servicios y unidades donde se utilicen los productos fabricados por dicho laboratorio en presentación de ampolla plástico BFS, siendo los más críticos, el Cloruro de potasio 10% y Lidocaína 2%, ambos en presentación para administración endovenosa.

De acuerdo a la información disponible en el sitio oficial del ISP, entre el 22 de abril de 2022 y el 23 de noviembre de 2023 se ha ordenado el retiro de al menos 26 productos vinculados a los proveedores Difem Laboratorios y Laboratorio Sanderson S.A.

Asimismo, el desglose resalta que al 31 de diciembre del 2023, el ISP, a través del Subdepartamento Laboratorio Nacional de Control, ha analizado un total de 1087 muestras. Del total, nueve muestras presentaron el complejo Burkholderia cepacia y 103 confirmaron hallazgos de otros microorganismos.

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