Proyectos y construcción: no nos podemos quedar atrás

Una provincia como la de Biobío, es un pilar para la economía regional y nacional. Aquí es el lugar de Chile donde mejor se desarrolla el rubro maderero y donde la agricultura de exportación o el sector lechero, tienen gran fuerza.

Esta economía, además, contribuye a la calidad de vida de las familias, ya que desde el punto de vista de los empleos, prácticamente todos sus habitantes tienen un pariente que depende económicamente de una forestal, una planta de remanufactura, una celulosa o un aserradero.

Al ser una zona tan potente desde el punto de vista industrial, se hace necesario contar con los espacios acordes a la época y al mercado, que permitan otorgar facilidad de transporte de las grandes cargas, pero también que otorguen facilidad en la movilidad a las miles de personas que se desplazan dentro de Los Ángeles y para quienes van o vienen desde las 14 comunas de la provincia de Biobío. Ahí estamos al debe.

El presidente de la Cámara Chilena de la Construcción, Claudio Moraga, ha realizado en innumerables ocasiones, el llamado a progresar, a generar proyectos que permitan desarrollar la zona. Por ejemplo, ha planteado la posibilidad de contar con una gran avenida de acceso por el camino a María Dolores para quienes ingresen a Los Ángeles. Asimismo, ha señalado la necesidad de contar con una doble vía en avenida Las Industrias (ex Ruta 5 Sur), o incluso, al interior de la ciudad, mejorar la conectividad de avenidas como Oriente, que se cortan por un lado por el estero Quilque y que por otro se transforma en una insignificante calle de acceso a un sector residencial donde viven miles de personas.

Hace unos días hablábamos en esta misma editorial, de la necesidad de contar con más espacios para la familia, áreas verdes, plazas y parques urbanos, pero sin lugar a dudas, que sin proyectos y autoridades motivadas en generar estas instancias, es poco lo que se puede hacer.

No se pueden negar los intentos que hoy se están concretando como la avenida Padre Hurtado o el nuevo parque de la costanera Quilque, pero a todas luces, no es suficiente. Estamos estancados.

Los Ángeles y la provincia de Biobío, necesitan crecer, necesitan aeropuertos y por sobre todo, recursos del nivel central para poder desarrollar una provincia que se duerme en el retraso vial, en las obras con gran burocracia y que cuando ven la luz, ya están obsoletas.