Agroforestal

Experto plantea que opción de la agricultura regenerativa para reducir uso de agroquímicos

Sin embargo, el director de Regenerativa admitió que el sistema no puede implementarse por completo, considerando que predios vecinos utilizan métodos convencionales en el manejo y control de las plagas.

La agricultura regenerativa propone eliminar el uso de agroquímicos a través de una mirada ecosistémica del cultivo, hasta que se pueda disminuir al mínimo su aplicación.
La agricultura regenerativa propone eliminar el uso de agroquímicos a través de una mirada ecosistémica del cultivo, hasta que se pueda disminuir al mínimo su aplicación. / FUENTE: Diario La Tribuna

El director de Regenerativa, Alejandro Florenzano, se refirió a los daños ocasionados por los agroquímicos a las abejas, haciendo ver que además de la reducción en su uso, están surgiendo alternativas con vez controladores naturales de plagas que provocan mayor diversidad y resiliencia en el agro-ecosistema.  

El experto explicó que "hay mucha evidencia de que diversos agroquímicos, sobre todo insecticidas, que tienen efectos nocivos sobre los polinizadores. Estos productos no solo son nocivos para los animales y los insectos, sino que para quienes los aplican y para el consumidor".

Por esa razón, añadió, se están realizando esfuerzos para erradicar el uso de estos elementos dañinos, que afectan a los insectos y los polinizadores.

La idea es que además de proteger la producción y los rendimientos agrícolas, a través de la "agricultura regenerativa se apunte a compatibilizar mejor la agricultura con el medioambiente y la salud", complementó Florenzano.

El especialista explicó que la agricultura regenerativa propone reducir el uso de estos compuestos "para eliminarlos e ir reemplazándolos por alternativas menos dañinas. Las medidas consisten en generar mayor biodiversidad, porque las plagas tienden a ser más graves cuando hay poca diversidad".

Ahondó en el concepto, explicando que "al manejarse los agro-ecosistemas con distintos venenos para matar las yerbas, los hongos y los insectos, se busca que no haya vida fuera de la planta objetivo, haciendo que cualquier plaga tienda a multiplicarse".

Sin embargo, añadió, "si manejamos el cultivo con un enfoque ecosistémico, donde hay corredores o islas de biodiversidad, por ejemplo, con flores o yerbas nativas así como insectos o animales que puedan ir controlando las plagas, se puede mirar al sistema agrícola y su resiliencia". De esta manera, aseguró, "el campo será menos atractivo y abierto para el desarrollo de plagas".

El experto reconoció que implementar la agricultura regenerativa es complejo "y por mucho que uno quiera hacer cambios dentro del campo propio, los vecinos que están alrededor siguen haciendo un manejo convencional".

Debido a la convivencia de ambos manejos, el director de Regenerativa planteó que "la presión de la plaga va a venir de todas formas. Si tengo 10 hectáreas y estoy rodeado de miles de hectáreas donde el campo se maneja de esa forma, no hace mucha diferencia lo que yo haga".

"La presión de la plaga llega igual y siendo realista habrá que utilizar productos para que la plaga no se lleve toda mi cosecha", sopesó.

Por lo mismo, Florenzano recomendó que "en esos casos se reemplacen los productos más nocivos por otros que puedan cumplir una función similar y que cumplan con legislaciones más exigentes que la chilena. La agricultura orgánica es un ejemplo, y esta permite solo un tipo de productos".

CAMBIO GRADUAL HACIA AGRO-ECOSISTEMAS

El director de Regenerativa planteó que un buen camino a seguir en materia de cambio hacia el uso de fertilizantes más amigables medioambientalmente es "no estar usando los peores venenos para los polinizadores y luego buscar formas o estrategias para ir reduciéndolos".

"Eventualmente se van eliminando y se genera un agro-ecosistema con una mirada ecosistémica del cultivo", proyectó Alejandro Florenzano sobre los resultados de dichas prácticas.




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