El impacto que han generado los incendios forestales ocurridos desde inicios de febrero no se explica únicamente en cifras, las que de por sí ya son catastróficas, como la cantidad de personas fallecidas, las viviendas totalmente consumidas o las hectáreas arrasadas por las llamas.
Si bien los informes elaborados por las entidades que corresponden dan cuenta de una verdadera devastación del medioambiente y entorno de cientos de familias, hay un aspecto que a ratos pareciera quedar un tanto relegado.
Se trata de la salud mental de las personas que han sido víctimas de los incendios, quienes si no son tratadas a tiempo y de la manera adecuada, podrían sufrir nefastas consecuencias a futuro.
En este contexto, hace una semana llegaron a la provincia de Biobío profesionales de la nortina ciudad de Arica, integrantes del equipo de Apoyo a la Respuesta en Salud Mental para Emergencias y Desastres (Arsam).
Ellos llegaron para apoyar el trabajo de sus pares del Servicio de Salud Bío Bío, quienes a su vez, han prestado un importante apoyo en terreno sumándose al trabajo de los equipos de salud primaria de los municipios involucrados.
EQUIPO MULTIDISCIPLINARIO
En conversación con radio San Cristóbal, dos de los integrantes del equipo Arsam de Arica explicaron cómo ha sido llegar a zonas totalmente destruidas por el fuego, a través de un trabajo de psicólogos, trabajadores sociales y técnicos sociales, entre otros.
“Una de las funciones del equipo es conocer el lugar o territorio, y nos dimos cuenta que habían muchos pueblos por varios lados; entonces, se hicieron las gestiones y nos señalaron cuál sería el escenario al que nos íbamos a enfrentar”, comentó Cristian Videla, trabajador social del equipo Arsam Arica.
Añadió que en esos lugares “nos llamó la atención que las personas primero, con sus propios recursos y el conocimiento que tenían del sector, fueron los que brindaron ayuda. Entonces, la respuesta comunitaria o de las personas fue bastante importante”. A esto se sumó el apoyo de las postas cercanas a los lugares más afectados, y luego de los servicios de Salud.
Por su parte, Zvi Tacussis, psicólogo de Arsam Arica, explicó que parte del trabajo que han realizado en terreno tiene que ver con primeros auxilios psicológicos, que “no se remiten solamente a la psicología”. Indicó que más bien tiene que ver con una estrategia impartida por la Organización Mundial de la Salud “que puede ser aprendida por la comunidad”.
Por ello, Tacussis definió a quienes integran el equipo Arsam como “capacitadores y también como respondedores, es decir, cuando requerimos poder realizar acciones de primeros auxilios psicológicos, tenemos equipos formados para poder dar esta respuesta”. Además de las duplas psicosociales conformadas para esta ocasión, indicó que en otras instancias también trabajan con terapeutas ocupacionales, médicos generales o psiquiatras, con el propósito de tener distintas miradas.
DIAGNÓSTICO
Luego de recorrer distintas zonas y realizar las entrevistas a los afectados, Zvi Tacussis afirmó que “la población está muy afectada en el sentido del estrés inicial del primer impacto, y esa afectación interviene en el sueño, en el apetito, en el ánimo. Aparecen síntomas de estrés agudo, de ansiedad, pero que muchas veces esas primeras respuestas van disminuyendo de forma natural al transcurso de los días”.
No obstante, advirtió que en otros casos esos síntomas se han mantenido o agravado por situaciones previas. “Para esas personas buscamos poder facilitar el acceso a la atención de salud”, puntualizó, indicando que la idea es reforzar las intervenciones con un seguimiento adecuado caso a caso. “De aquí queda un trabajo, porque todavía estamos respondiendo en el durante la emergencia; después viene el post emergencia, y ese va a ser un trabajo de largo aliento”.
Finalmente, Viviana Velásquez, jefa de la Unidad de Salud Mental del SS.BB., agradeció el trabajo realizado en conjunto con sus pares de Arica. “La capacidad que hemos tenido de respuesta a nivel local, con los apoyos de los hospitales de Familia y la Comunidad inclusive, se nos hizo poco. Entonces, tuvimos que levantar el requerimiento al Ministerio de Salud que nos apoya con el equipo Arsam de Arica, que lo agradecemos y estamos muy contentos porque se sumaron inmediatamente al trabajo que estábamos planificando”.
Junto con las comunas de Nacimiento y Yumbel, que se han intervenido inicialmente, el trabajo continuará en otras localidades que igualmente han sido afectadas por los incendios, y donde las familias de seguro agradecerán el apoyo en salud mental.