El gerente de la Asociación de Canalistas del Laja, Héctor Sanhueza, aseguró que las lluvias acumuladas en la temporada 2024 permitirán contar con recursos hídricos suficientes para que los agricultores no consideren restricciones de agua a la hora de planificar sus siembras y cultivos.
Pese a este auspicioso panorama, el personero llamó a invertir en embalses para que las precipitaciones invernales puedan ser acumuladas y utilizadas en las épocas deficitarias del verano.
Sanhueza precisó que las lluvias de las semanas pasadas "no fueron tan complicadas de manejar en cuanto a la pluviometría, porque las grandes inundaciones se produjeron en los temporales anteriores. Desde el punto de vista de la funcionalidad, los canales no quedaron tan expuestos como la vez anterior".
El representante de los regantes del Laja, que riegan sobre 60 mil hectáreas en la provincia de Biobío, recalcó que no hubo problemas en la conducción de las aguas lluvias, aunque el fuerte viento solo generó la caída de muchos árboles: "Algunos, incluso cayeron dentro de los canales, por lo que nos vimos obligados a adelantar el proceso de limpieza y retiro para estar preparados al inicio de la temporada, a mediados o fines de septiembre".
El gerente de los regantes locales observó que "este un año ha sido abundante en pluviometría, lo que significa que los sistemas, ya sea por la naturaleza o la inversión humana, como embalses de cabeceras, nos garantizan que la temporada de riego que está por iniciarse va a tener una muy buena oferta hídrica".
Por lo mismo, el gerente de la Asociación de Canalistas del Laja afirmó que "es conveniente y necesario orientar recursos hacia los embalses, de tal manera que permitan que las abundancias de las lluvias invernales puedan compensar los déficit en la primavera o en el verano. Esto aparentemente viene aparejado con el cambio climático".
DECISIONES DE SIEMBRA
Sobre los cultivos y siembras para la temporada 2024-2025, Sanhueza destacó que no estarán condicionadas a una menor disponibilidad de agua para riego: "Las decisiones deben partir de la base que será una temporada relativamente normal, por lo tanto, lo que decida sembrar cada agricultor puede responder a expectativas económicas y no de demanda hídrica".
Sin embargo, recalcó que "por muy abundante o normal que sea este invierno, nunca dejemos de considerar que las cosas han cambiado para quedarse. Sigamos siendo cautos y sigamos buscando incesantemente la eficiencia en el uso de los recursos hídricos, porque no siempre vamos a tener las disponibilidades que aparentemente estamos teniendo en esta oportunidad".
