Cada año, la Cruz de Mayo se celebra con mucho entusiasmo y expectativa en todo el país. Esta práctica tradicional se remonta a la conquista española, cuando los misioneros desconocían la lengua de los nativos, carecían de imágenes y no tenían suficientes predicadores, por lo que hicieron uso de la cruz y elementos para difundir el mensaje cristiano.
La cruz era de fácil construcción y se ubicaba en un sitio visible para la comunidad a evangelizar: Cerros, intersecciones de caminos u otros espacios concurridos. Con el tiempo esta actividad dejó de ser eminentemente de la Iglesia y se convirtió como una festividad criolla y de beneficio para los más pobres.
Este evento, que combina componentes religiosos, culturales y artísticos, tuvo lugar en las distintas comunas del Biobío, en donde por décima tercera vez destaca la comuna de Cabrero con su feria costumbrista y actividades criollas que reunieron a cientos de personas.
Según lo informado por la Municipalidad, la instancia benefició a más de un centenar de emprendedores, que ofrecieron a la comunidad los rubros de gastronomía, artesanía y otros. "13 años donde los emprendedores han tenido oportunidad, ellos trabajan y esos trabajos sin duda permite retribución para seguir avanzando con la familia", señaló el alcalde Mario Gierke.
TRADICIONES VIVAS
Hace unas semanas el Concejo Municipal de Cabrero rechazó la realización del evento "Cruz de Mayo" por primera vez en más de 14 años, programada para los días 10, 11 y 12 de mayo. Esta noticia había dejado a más de 116 emprendedores, entre ellos, seis cocinerías, amasanderías, siete carros food truck, 23 puestos de artesanía, sin acceso a esta oportunidad laboral.
Debido a la relevancia que tiene esta tradición no sólo en el fomento económico sino en la identidad del territorio, después de varias gestiones, la comunidad pudo participar de esta instancia típica del pueblo huaso.
Este año la feria costumbrista más grande de la provincia reunió a cientos de familias de todo el Biobío, contó con la participación de música en vivo de Los Tigres de Parral, la presentación estelar de María José Quintanilla, cerrando con la tradicional "Quema de la Cruz de Mayo".
Entre las actividades desarrolladas en los tres días del evento (viernes, sábado y domingo), los asistentes resaltaron la quema de la fogata como una acción emotiva y divina.
Referente a las ventas de los emprendedores, artesanos y artistas que estuvieron en la ocasión, Cilia Gallegos, de la Villa Patrono de la comuna de Yumbel, contó su experiencia. "Nuestros productos son licores artesanales de maceración de un año para otro, y el vino que básicamente este mes comenzamos a abrirlo, tuvo un buen resultado y una muy buena aceptación porque quienes nos visitaron", señaló.
