Cultura

Pareja angelina representará a Chile en la final mundial de tango en Buenos Aires

Luego de ganar el nacional de tango en Osorno durante julio, Camilo Rubilar y Paulina Cazabon viajarán a la capital trasandina a representar a Los Ángeles y a Chile en una instancia internacional de baile.

Pareja angelina representará a Chile en la final mundial de tango en Buenos Aires, La Tribuna
Pareja angelina representará a Chile en la final mundial de tango en Buenos Aires / FUENTE: La Tribuna

El Campeonato Mundial de Tango, que partió hace una semana en Buenos Aires, capital de Argentina, tiene una pareja dos chilenos que representarán a Los Ángeles en la búsqueda del primer lugar en la gran final internacional. 

Se trata de Paulina Cazabon y Camilo Rubilar, quienes hace un año se han venido preparando para esta instancia. En julio se ganaron el derecho a participar al lograr el primer lugar en la final nacional de Tango realizada en Osorno.

En la jornada de hoy miércoles inician su viaje a la capital trasandina donde se prepararán para la gran final programada para este próximo martes 27 de agosto, donde los representantes nacionales esperan adjudicarse el primer lugar.

Para conocer en detalle cómo se prepararon y las impresiones de ambos bailarines al llegar a este mundial, diario La Tribuna conversó con Paulina y Camilo.

-¿Cómo se dio esta instancia que los llevará hasta Argentina a presentarse en el Mundial de Tango?

C: En julio comenzó el campeonato nacional de Tango, que tiene como objetivo elegir al representante de Chile en el mundial que hace ahora en Buenos Aires. Ganamos la categoría tango pista en primer lugar que nos da la posibilidad de representar a Chile en este evento.

Nosotros con ‘Pauli’ venimos trabajando hace aproximadamente un año. Aunque, nos conocemos hace muchos años, decidimos prepararnos para esta competencia y afortunadamente salimos campeones en un torneo que estuvo muy lindo en Osorno, con muchos bailarines de todo Chile, donde sacamos el primer lugar.

-¿Cómo comenzaron y cuál es el recorrido que tienen en el tango?

P: Con Camilo nos conocemos hace ocho o nueve años. En ese tiempo teníamos otros compañeros de baile pero ambos terminamos con nuestras respectivas parejas y estuvimos un tiempo sin bailar, pero nos pusimos en contacto para viajar al sur a hacer unas clases, así que le pedí que me ayudara y dimos cuenta que congeniamos súper bien en el tango.

Partimos con mucha responsabilidad pero sin grandes ambiciones, era como juntarse y bailar, disfrutar. Eso fue avanzando y finalmente se dio la posibilidad de ir al campeonato, lo cual era todo un desafío también porque no vivimos en la misma ciudad. Camilo es de Los Ángeles y yo soy de Santiago.

-En ese sentido, ¿cómo lo hicieron para ir como representantes de Los Ángeles entonces?

C: Primero, detallar que soy de Laja, pero ya llevo viviendo en Los Ángeles desde el 2000, ya son 24 años. Por lo mismo, decidimos representar a Los Ángeles en el campeonato nacional porque quisimos descentralizar el tango, y que una pareja que representa el sur de Chile ganara el campeonato también era súper importante para nosotros, para mi sobre todo, y Pauli me apoyó al 100%. Fue algo conversado y a propósito también.

P: Soy santiaguina, pero cuando comenzamos a conversar con Camilo acerca del campeonato y decidir a qué ciudad representábamos, estaban las opciones de Santiago, Los Ángeles, e incluso Concepción, porque todos nuestros ensayos los hicimos allá. Finalmente decidimos que fuera una de las ciudades donde vivíamos, pero que no fuera Santiago, porque siempre son muchas las parejas que representan a la capital, que es como una centralización de la representación de tango.

-En cuanto a la logística también, ¿cómo se prepararon y coordinaron para ir al Mundial?

C: Con mucho esfuerzo, porque hay que entender que la preparación para este campeonato es autogestionada. Si bien el campeonato nacional tiene un premio en dinero, ya lo habíamos gastado antes, aunque el premio sí nos ha permitido tener reconocimiento del proyecto, tenemos más amigos, también con respecto a donde quedarnos, los pasajes, etc. Pero todo ha venido desde la autogestión, desde los zapatos, los vestidos, el traje, todo ha sido propio y también es parte del proceso.

P: Finalmente el esfuerzo se hace en pareja, con Camilo compramos los pasajes juntos, arrendamos el departamento donde vamos con más personas, y nos armamos un grupo de contención bien bonito, que también nos acompañó a Osorno, y eso es súper importante.

-¿Qué esperan, además del premio claramente, durante esta instancia internacional?

C: Hemos tenido un montón de aprendizajes y creo que un resumen muy grande de esto es que disfrutaremos el proceso. Más que el resultado final, más que encontrar el destino, hemos ido aprendiendo a querer el proceso, a cerrar los procesos y disfrutarlo más que el resultado final.

Tuve la posibilidad de participar de otros mundiales, ya he competido contra los más grandes en esa época, y confiamos en que tenemos experiencia, ganas y estamos con el mismo objetivo de interpretar lindo, que la gente nos vea que interpretamos la música como buenos bailarines que somos. Ese es el objetivo del bailarín, más que el resultado es la interpretación y tocar los corazones de la gente.

P: Ambos nos encontramos en un momento en que estábamos sin bailar. Tampoco teníamos ganas de volver a hacerlo, no buscábamos una pareja para bailar, sino que era más bien como tener el tango como un hobby, no como un trabajo constante (...) pero, como dice Camilo, uno trabaja en el propio baile, en la impresión que deja, en la interpretación, en mostrar el trabajo desde esa honestidad, sabiendo que el resultado es la fotografía del momento, y si bien puede haber reconocimiento, si no llega, igual se da valor a lo hecho hasta el momento.




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