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Los pronósticos meteorológicos advertían que sería uno de los días más calurosos en lo que va corrido de este mes, con temperaturas que bordearon los 40 grados. A lo anterior se sumaban dos factores que multiplicaban el riesgo: las fuertes rachas de viento y la baja humedad ambiental.
Sin embargo, de acuerdo a los registros de la estación María Dolores de la Dirección Meteorológica de Chile, la temperatura máxima del domingo fue de 33.6 grados, a las 18:13 horas. El registro incluso es inferior al sábado cuando se anotaron 36 grados a las 17:17 horas.
Un dato relevante es que durante los primeros 11 días de este año, el promedio de la temperatura máxima se ha situado en los 33 grados, lo que lo convierte en el enero más caluroso desde que existen registros en la zona. De hecho, a excepción del 1 de enero, en todos los demás días se han producido máximas sobre los 30 grados, de acuerdo a los datos de la Dirección Meteorológica de Chile.
Estos anuncios de altas temperaturas obligaron a que el pasado fin de semana se tomaran todos los resguardos desde el punto de vista de la institucionalidad, como la declaración de alerta roja en todo el territorio, además del acuartelamiento de las unidades de bomberos, la suspensión de las cosechas, el cierre de las reservas y parques nacionales y el imperioso llamado a la ciudadanía a evitar el uso de fuego.
Sin embargo, entre el sábado y el domingo hubo emergencias que causaron preocupación en Los Ángeles y Negrete. En la tarde del sábado se produjo un incendio de pastizales en el sector poniente de la capital provincial, a continuación de la villa Los Profesores. Las unidades de bomberos y las brigadas forestales debieron trabajar intensamente para controlar la emergencia que terminó destruyendo alrededor de 15 hectáreas de pastizales.
Durante la noche del sábado hubo otra emergencia en el sector de Santa Amelia en la comuna de Negrete, emergencia que obligó a la intervención de bomberos de la zona en conjunto con brigadas de la Conaf. El personal a cargo de la emergencia fue el comandante Eduardo Torres Toro y se trató de un "fuego forestal de gran magnitud" en el sector Santa Amelia.
En la tarde del domingo hubo una emergencia en el sector Los Tilos, al norte de la ciudad de Los Ángeles. En esa zona rural se declaró un incendio forestal que fue acicateado por las condiciones atmosféricas.
El fuego, que habría partido en un punto de desecho de neumáticos, se expandió con extrema rapidez y amenazó a una decena de viviendas de la zona. Sin embargo, el rápido actuar de las brigadas de la Conaf, con el apoyo de unidades áreas, frenó el avance de las llamas.
Aviones y helicópteros debieron extremar sus recursos para confinar el fuego y permitir que el trabajo en tierra liquidara las llamas y controlara el siniestro.
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