El Servicio Nacional de Prevención ante Desastres emitió en horas de la jornada de hoy una Alerta Temprana Preventiva Regional para el 27 de octubre de 2023.
Según la información proporcionada por el órgano, "de acuerdo con la información proporcionada por la Dirección Meteorológica de Chile (DMC), (...) (se) indica precipitaciones normales a moderadas desde la mañana del sábado 28 hasta la mañana del domingo 29 de octubre en los sectores Precordillera y Cordillera de la región".
Un segundo aviso de la DMC "indica viento normal a moderado desde la tarde del viernes 27 hasta la noche del sábado 28 de octubre en sectores Litoral, Cordillera Costa, Valle, Precordillera y Cordillera de la región".
PRONÓSTICOS DE LLUVIA
Desde Senapred agregaron que "en la actualización del Informe de Riesgo Meteorológico emitido durante la presente jornada por la DMC informa de (montos de precipitación por sector en la región)".
Según el detalle, las precipitaciones para la jornada del jueves varían entre los 15 a 35 milímetros de agua entre el litoral, cordillera de la costa, valle y precordillera de Biobío, con pronósticos de entre 20 a 30 cm de precipitaciones sólidas para la zona de la cordillera. Los vientos en todo el sector variarán entre los 25 a los 40 kilómetros por hora, con rachas de hasta 60 kilómetros en la cordillera.
Para el viernes 28 del presente mes se esperan precipitaciones de entre 15 a 40 milímetros y precipitaciones de entre 60 a 80 cm en la cordillera, con vientos de entre 25 a 40 kilómetros por hora y rachas de hasta 70 kilómetros en la cordillera. "En consideración de estos antecedentes la Dirección Regional de SENAPRED Biobío, en coordinación con la Delegación Presidencial Regional, Declara Alerta Temprana Preventiva Regional por Evento meteorológico, a contar de este momento y hasta que las condiciones lo ameriten", se indica en el texto con fecha de 24 de octubre.
MUNICIPALIDADES DEBERÁN MANTENERSE ALERTA
Lo anterior significa que el SINAPRED en la región del Biobío de acuerdo con las competencias técnicas correspondientes a través de sus distintos organismos deberá mantener las coordinaciones necesarias para la efectividad de los mecanismos de alerta y de gestiones de prevención, a fin de evitar situaciones de riesgo para la población, recomendando diferentes medidas.
Las Municipalidades y la población deberán monitorear permanentemente caudales de las quebradas, poniendo atención a los aumentos súbitos de escorrentía, los que son indicadores de posibles aluviones y/o inundaciones. Asimismo, poner atención a la disminución abrupta del caudal, lo que podría significar un represamiento del cauce aguas arriba del punto de observación. La Dirección General de Aguas debe mantener el monitoreo constante de las estaciones hidrométricas de los cauces de ríos y esteros.
Las Municipalidades deberán mantener monitoreo de las rutas y puentes históricamente afectados producto de los eventos meteorológicos. Las Municipalidades deberán monitorear la red de aguas lluvias. Las Municipalidades deben instar a la población a conducir con precaución o restringir la circulación de vehículos por las diferentes rutas, principalmente en zonas precordilleranas y cordilleranas de la Región, con especial atención a la posibilidad de viento blanco. Las Municipalidades deben advertir a la población, a través de sensibilización y orientación comunitaria a no exponerse innecesariamente a situaciones de riesgo, la población deberá permanecer atenta a través de medios oficiales y acatar las indicaciones de la autoridad.
RECOMENDACIONES GENERALES
Las Municipalidades deberán considerar como zonas críticas, todos aquellos sectores que hayan sido afectados anteriormente por fenómenos de remociones en masa e inundaciones y alertar a la población para que tomen las precauciones del caso y pongan atención a los caudales de quebradas y escorrentías en las laderas y taludes en las cercanías de los lugares que habitan. Las compañías de electricidad deben mantener el monitoreo y vigilancia de las redes de transmisión y distribución de energía eléctrica y mantener brigadas de respuesta para ir en apoyo a la población afectada.
Precipitaciones: El Sistema de Prevención y Respuesta ante Desastres deberá mantener las coordinaciones necesarias para la efectividad de los mecanismos de alerta y de gestiones de prevención. Además, se recomienda a la comunidad reforzar la vigilancia de los sectores de mayor vulnerabilidad a fin de evitar situaciones de riesgo, especialmente de los cursos de agua y quebradas, teniendo especial resguardo por acumulación de agua en sectores bajos y posibles aumentos de caudal de los cursos de agua con potencial desborde, por lo que se deberá mantener atención estado de ríos y caminos. En caso de inundación de vivienda, deberá ser realizada a sectores de mayor altura, y en atención a los albergues establecidos por la autoridad local, procurando desconectar el interruptor general del sistema eléctrico, llaves de agua y gas, verificando estas instalaciones al regresar a tu vivienda. Mantener limpieza de canaletas y desagües en viviendas, además de acequias y vías de evacuación de aguas lluvia libre de desechos y desperdicios que puedan obstaculizarlas. Evita acciones temerarias como el cruce de pasos de desnivel, calles anegadas o inundadas.
Viento: El Sistema de Prevención y Respuesta ante Desastres deberá mantener las coordinaciones necesarias para la efectividad de los mecanismos de alerta y de gestiones de prevención a fin de evitar situaciones de riesgo para la población, ya que se podría generar afectación por voladuras de techumbres, alteración de conectividad, interrupción de suministro eléctrico y telefónico por caídas de árboles o parte de sus ramas en tendido eléctrico, tanto en sectores rurales como urbanos. Se recomienda a la población asegurar techumbre de las viviendas, realizar poda de árboles y ramas y asegurar objetos colgantes que pudieran desprenderse por acción del viento, generando situaciones de emergencia.