Es natural que se propague la indignación, por el fallecimiento de una persona, transitando en su bicicleta por una vía pública. Y mucho más cuando se nos informa que el conductor del vehículo que chocó al ciclista, conducía en aquella mañana de 25 de diciembre, alcoholizado, por haber bebido durante toda la noche, hasta minutos antes del choque en cuestión junto a un grupo de personas, de las cuales dos, lo acompañaban, también borrachos, aquella mañana trágica. Estos últimos, aparentemente por orientación de un abogado, habían declarado que iban "durmiendo" a bordo del automóvil por tanto, según lo habría señalado ellos mismos, no tenían responsabilidad en este homicidio.

¿Pero es así?

Todos son responsables, especialmente los dueños de casa en que los ocupantes de este automóvil, consumieron alcohol y les permitieron salir borrachos conduciendo un vehículo motorizado. Son cómplices del homicidio. Y en relación a los que acompañaban al conductor y declararon ir durmiendo, también son cómplices de homicidio por cuanto ellos permitieron la conducción de una persona que, alcoholizado tomó el volate del vehículo, sin haber tenido objeción alguna por quienes le acompañaban. Basta observar que fueron pasajeros de plena confianza lo que indica tal disposición hacia el chofer. 

No es posible continuar aceptado tanta irresponsabilidad. Espero que el municipio se haga parte de este juicio y aplique las disposiciones señaladas en el Art 28 de la LOC de municipalidades a fin de que represente el dolor de toda una comunidad por este homicidio en que están directa o indirectamente varios responsables, a partir, como ya lo expresáramos, por los dueños de casa en que consumieron alcohol y luego abordaron el vehiculó motorizado sin que nadie detuviera tal hecho criminal.

Se suma a todo lo anterior que estos individuos criminales son de nacionalidad venezolana y se encuentran en Chile indocumentados, lo que hace ver su ingreso al país por algún paso ilegal incumpliendo nuestra institucionalidad.  En verdad, esto indigna. Indocumentados y homicidas, es un hecho dramático que deja un hogar chileno sin aquel padre y esposo, responsable de proveer en parte importante, los recursos para vivir y crecer junto a su mujer y sus hijos.

Discrepo lo dispuesto por el tribunal al dejar en libertad a quienes acompañaban al conductor. Todos son responsables y si, para esconder su irresponsabilidad declaran ir durmiendo, mayor es aún su responsabilidad porque permitido el vehículo ponerse en marcha, por parte de los dueños de casa en que existió este consumo de alcohol una noche entera, eran ellos los responsables del conductor, es así que por extensión, debieron quedar tras las rejas junto al conductor y si a eso se sama que son indocumentados, con mayor razón.

Al artículo 28 de la Ley Orgánica de Municipalidades, se le sumó el año 1995, esta disposición que permite al alcalde representar en la justicia, a la población en asuntos de interés comunal. Este es el caso, el Alcalde tiene la palabra, a los ciclistas no hay que dejarlos solos ni menos al hogar de tan desafortunado ciclista que en cuya persona hubo un homicidio. El alcalde llegará hasta el final y comprometerá para siempre a quienes son dueños de casas y permiten visitas alcoholizadas conducir vehículo. Tal irresponsabilidad, debe castigarse.

Mario Ríos Santander