El 15 de agosto se conmemora el Día Mundial de la Relajación, instancia que invita a reflexionar sobre la importancia de dedicar tiempo a ésta, especialmente en el agitado escenario social en el que estamos insertos.
En este contexto, el director de la carrea de Psicología de la Universidad de Las Américas, Gerardo Riffo, destacó que la vida moderna está dominada por la "inmediatez", lo que lleva a hábitos poco saludables y mantiene a las personas en un constante estado de alerta.
La práctica regular de técnicas de relajación, según el psicólogo, ofrece numerosos beneficios emocionales y mentales. "El principal es que conseguimos una intensa sensación de bienestar, calma y tranquilidad", explicó, destacando que esto se traduce en mejoras en la concentración, regulación emocional, aumento de la tolerancia a la frustración, refuerzo de la confianza en uno mismo, incremento de la creatividad, reducción de síntomas de estrés y ansiedad, mejora en la calidad del sueño, y una mayor disposición al aprendizaje.
Para quienes tienen rutinas ocupadas, el profesional de UDLA recomendó técnicas de relajación que son tanto efectivas como fáciles de implementar. Entre ellas mencionó ejercicios de meditación, mindfulness, la práctica de yoga o taichi, la realización de alguna actividad deportiva, y la desconexión digital. Además, desde la psicología, sugirió estrategias específicas como la respiración diafragmática y las relajaciones progresivas de Jacobson.
"Las redes sociales y la tecnología nos ayudan mucho para la obtención de información y la comunicación, pero su uso prolongado también puede traernos efectos negativos", advierte el experto. Y añade que la constante exposición a múltiples estímulos incrementa el umbral de estrés y alimenta fenómenos como el "FOMO" (Fear of Missing Out), miedo a estar ausente virtualmente, que genera ansiedad por el temor a perderse eventos o experiencias que se difunden a través de las RRSS.
Finalmente, Riffo recomendó integrar prácticas de relajación en la vida cotidiana de manera sostenible. "Destinar un espacio a alguna actividad que nos ayude a estar tranquilos, lo que sea más cómodo para cada persona. Si realizan alguna técnica de forma correcta, sentirán efectos inmediatos, y con el paso de unas semanas conseguirán muchos beneficios físicos y emocionales. Con el tiempo, esto se transformará en un hábito, una tarea sencilla que podrán realizar en cualquier momento o lugar", finalizó el especialista.
