La viruela del mono es una enfermedad zoonótica de tipo viral. Esto quiere decir que el reservorio está en los primates y se puede transmitir al ser humano cuando entra en contacto con algún animal o persona que la presente.
La preocupación por esta enfermedad se incrementó en los últimos días, debido a que La Organización Mundial de la Salud (OMS) la declaró como una emergencia de salud pública a escala internacional, tras el aumento de casos en la República Democrática del Congo y la posibilidad de una mayor propagación.
Esta decisión ha desencadenado una respuesta internacional coordinada ante un acontecimiento extraordinario y la movilización de recursos, como vacunas y pruebas diagnósticas, para frenar su propagación.
Al respecto, el médico infectólogo de adultos de Clínica Alemana y jefe de Infectología del Hospital Militar, Dr. Reinaldo Rosas, relató que cuando una persona tiene contacto con otra que sí lo está, a través de las lesiones, el virus se replica de forma activa y hace que -en África, que es donde está el virus principal- la población afectada sean hombres, mujeres y niños, siendo estos últimos quienes pueden sufrirla de manera más grave.
Asimismo, explicó que es especialmente peligrosa en aquellos pacientes que presentan defensas debilitadas, como pacientes con VIH y niños pequeños.
En estos casos,
SÍNTOMAS Y CONTAGIO
El especialista detalló que los síntomas iniciales son fiebre, decaimiento, pueden haber ganglios inflamados y, posteriormente, pueden aparecer lesiones cutáneas o en las mucosas, dependiendo dónde fue la inoculación. Son estas últimas las que permiten sospechar el diagnóstico.
En la actualidad, detalló Rosas, el tratamiento de la viruela del mono es de los síntomas pero es muy contagiosa.
La trasmisión de persona a persona puede producirse por contacto estrecho con secreciones infectadas de las vías respiratorias o lesiones cutáneas de un paciente infectado.
Asimismo, "el virus también puede transmitirse a través de algunas superficies como las sábanas; por lo tanto, el frecuentar un lugar donde pudo haber estado una persona infectada, de igual forma, puede ser un factor de riesgo aun no habiendo tenido contacto directo con la persona", relató el infectólogo.
En general, la incubación puede ser entre cinco a 20 días; al respecto, "será un periodo largo desde el momento en que la persona se expuso hasta que se manifiestan los síntomas. Por lo tanto, hay que estar alerta, sobre todo los viajeros que han participado en fiestas o reuniones sociales o en lugares donde hay reuniones masivas como conciertos u otros eventos, ya que en estos lugares pueden haber contagios inadvertidos", relató Rosas.
De igual forma, recalcó que el virus puede derivar en un caso grave si se consideran algunos factores de riesgo como aquellos pacientes que presenten inmunosupresión o quienes se estén sometiendo a quimioterapias o tome medicamentos que le disminuyan sus defensas.
"La mortalidad ronda entre el 1 y el 5% del total de las personas que se contagian; es más letal en niños y la variante que es la que está circulando ahora, en el rebrote en África, tiene algo más de mortalidad, pudiendo llegar -incluso- al 10%", explicó Rosas.
Es precisamente ésta, añadió el profesional, la preocupación de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en este momento y está evaluando si declarar de nuevo emergencia sanitaria internacional.
Al respecto, explicó que la OMS tiene la facultad de adoptar este tipo de decisiones en casos de enfermedades que tienen la capacidad de generar la trasmisión desde el lugar donde se genera un brote de importancia de salud pública hacia otros países; en este caso, de la viruela del mono desde África o los países de África donde este año han aumentado bastante los casos.
¿POR QUÉ ESTA EMERGENCIA SANITARIA NO ES UNA PANDEMIA COMO EN EL CASO DEL COVID19?
En torno a ello, el especialista explicó que la potencialidad de generar una pandemia tiene que ver con la transmisibilidad del virus, respecto de cuántas personas puede contagiar un paciente infectado.
En el caso de la viruela del mono, el infectólogo explicó que la mayor eficiencia es por contacto y no por vía respiratoria como ocurrió con el SARS COV 2, que se propagaba con gotitas y aerosoles. Por lo tanto, eficiente la transmisión era muy eficiente, lo que permitió que se diseminara rápidamente y afectara a un gran número de personas.
En este caso, "la dinámica de contagio es otra. Por lo tanto, esto no constituye una pandemia pero sí una alerta para que los equipos de salud estemos preparados para sospechar esta enfermedad, diagnosticarla a tiempo y darle el tratamiento que corresponde en cada caso", agregó el especialista.
De igual forma, el Dr. Rosas explicó que los casos de viruela del mono desde el brote asociado al año 2022 y hasta junio de 2024, se habían reportado un poco menos de mil 500 casos; este año, en tanto, se han registrado seis a partir de esta nueva emergencia sanitaria.
